Natación:

Las bondades que trae consigo el ejercicio de un deporte son excepcionales, más aún cuando a salud se refiere. Uno de los deportes más inclusivos es la Natación ya que esta actividad puede ser adaptada a personas con movilidad reducida o discapacitados, convirtiéndose esta práctica en una terapia de rehabilitación.

Tener una alteración, discapacidad motora no implica la invalidez o pérdida de potencialidades como persona, sino que es un desafío para desarrollar otro tipo de habilidades o capacidades diferentes, en esencia lo que realmente importa es descubrir lo que se es capaz de hacer y con este descubrimiento se logra el empoderamiento personal del desarrollo físico y psicológico.

Es así que la natación es una de las mejores formas para descubrir o redescubrir el movimiento, ya que el agua posee la particularidad de hacer que un cuerpo “pierda” peso y que flote, es decir que las deficiencias motoras se reducen dentro del agua.

Existen evidencias científicas que demuestran la efectividad de la natación adaptada como terapia de rehabilitación. En la red se pueden encontrar varios artículos con experiencias de personas que han logrado tener cierta independencia –gracias a la natación adaptada- al momento de vestirse, lavarse y comer… mejorando de esta manera su calidad de vida.

Objetivos en la natación adaptada

– Conocer y dominar el medio acuático
– Conocer medidas higiénicas y de recuperación que junto con el ejercicio físico en el agua posibiliten una mejora de la salud.
– Lograr una integración social plena de la persona con discapacidad, a través de un equilibrio entre el desarrollo psíquico, afectivo y motor.
– Mejorar la aptitud física para un posterior desarrollo de habilidades motrices básicas.
– Adquirir y mejorar el conocimiento y autocontrol de los movimientos de su cuerpo.
– Reeducar la postura de la persona.

Beneficios de la natación adaptada

– La natación adaptada busca el descubrir el máximo de posibilidades del cuerpo en el agua.

– Permite el desarrollo de la tonificación muscular,

– Ayuda a prevenir la obesidad porque impulsa el movimiento

– Controla la fatigabilidad de las personas puesto que provoca la relajación.

– Ayuda a reafirmar la autoestima, ya que la combinación entre el reconocimiento del propio cuerpo y tener que enseñar la imagen propia en las albercas o piscinas, estimula a aceptarnos, conocernos y generar interés en mejorar provocando de este modo el desinhibirse y borrar falsos pudores, miedos y complejos.

Es preciso señalar que la efectividad de la natación adaptada requiere que se acompañe con un entorno socializador en el que predominen los componentes lúdicos y recreativos que faciliten la estreches de lazos entre profesor y el paciente.